viernes, 21 de noviembre de 2014

“Del Expresionismo Orgánico a la Abstracción Intuitiva” por el pintor Pedro Solá


          En el arte, como en todo el universo, la movilidad es continua. Hay una mutación permanente, una dinámica evolutiva; búsqueda y desarrollo de una línea de trabajo que, al concretarse en la obra, da lugar naturalmente a una nueva etapa. Si este proceso se detiene, sucede la disolución, el fin del artista. Lo que comenzó siendo expresionismo, por su cualidad de carácter e intensidad cromática, y orgánico, por su inspiración en las formas de la naturaleza, evolucionando, devino abstracción intuitiva. 
          Abstracción Intuitivanacida de la intuición como sentido perceptivo, de la intuición como herramienta del psiquismo que permite  abarcar lo que esta más allá del horizonte visible por el intelecto. Más allá del intelecto no significa que la razón crítica esté ausente del proceso de realización de la obra, sino que esta no está limitada, supeditada al pensamiento discursivo. La intuición, hija del sentimiento, crea de un modo espontáneo, inmediato y “abarcante”. La abstracción, resulta del deseo de plasmar una cosa en si; como un objeto. Lo contrario de “representar” algo. 
          La obra abstracta pretende ser algo real por sí misma, como lo es una planta, una piedra, un animal. No una representación de lo real. Aunque pueden aparecer figuras reconocibles evocadas por la intuición en su contexto subterráneo, estas figuras no son más que referencias aleatorias, signos. En el proceso de creación intuitiva, el artista “se deja ir”, se comunica con las fuentes del ser, con el universo como totalidad. 
          Cada momento es único, total y definitivo, de ahí la importancia del gesto. El pensamiento, su estructura intelectual, participa en el ordenamiento que hace legible el caos primigenio, un ordenamiento imprescindible para la comunicación legible, para que la obra no sea la insensatez de un loco pretendidamente genial. 
          La intuición es una guía certera cuando no está contenida, amarrada, por lo intelectual que limita e intenta explicar lo que solo se puede percibir como sentimiento. Hay en ese camino una disolución del yo individual, una disolución del ego para dejar penetrar, sin interferencia, la máxima luminosidad. 
          El artista se interna en el inmenso desconocido, sin pretensiones de conquistador, sino más bien, como maravillado explorador
Por último, es preciso señalar que el dominio de la técnica es imprescindible para alcanzar, como una flecha certera, la transición luminosa, sin opacidades. Entendiendo por técnica, no solo el dominio del oficio, sino más bien la capacidad de elegir o inventar el medio adecuado para realizar la obra en una síntesis clara, que excluye los ornamentos.

Pedro Solá, nacido en Buenos Aires, es pintor, hijo y nieto de pintores. Ha viajado por gran parte del mundo y ha expuesto en muchos países. Actualmente está afincado en Sevilla.
          Ahora es posible ver una exposición de algunos de sus cuadros en LATiDOS, hasta el viernes 28 de noviembre.

viernes, 19 de septiembre de 2014

MANUEL SOLER y el CAJÓN FLAMENCO por Fernando García "Percu" (alumno de Manuel Soler)


MANUEL SOLER y el CAJÓN FLAMENCO
una pareja indisoluble


         Muchos de nosotros tuvimos ocasión de disfrutar con el arte del maestro Manuel Soler en los últimos años de su carrera. Unos pocos tuvimos la fortuna de estudiar con él: fui parte de un pequeño grupo de alumnos que, durante un lustro, pudimos aprender a fondo la mayoría de sus toques. Su estilo inconfundible con el cajón y su compás arrollador dejaron huella a través de múltiples colaboraciones con grandes figuras del flamenco. El reconocimiento como solista le llegó con el espectáculo 'Por ahí te quiero ver', que causó sensación en la IXª Bienal de Flamenco, allá por el año 96...
El autor del artículo en un curso con Manuel Soler.
Es el que está reflejado en el espejo tras el maestro Soler.
         Lo conocí en la Bienal del 98, en la que empezó a impartir cursos, y puedo afirmar que me enseño todo lo que sé. Dimos clases entre el 98 y el 2003, fecha de su temprana desaparición... entonces, muchos nos quedamos huérfanos de su arte y su personalidad. Hoy me siento orgulloso de poder continuar difundiendo su intenso y valioso legado.
         Hemos de recordar aquí su clases magistrales en la IVª Convención Nacional de Percusionistas celebrada en el Teatro Central de Sevilla en otoño del 99, es decir, hace ahora 15 años. Convención que fue clausurada de manera brillante con la primicia de su magnífico espectáculo 'A Compás', en el que le acompañaban jóvenes promesas del baile como Javier Barón, Rafael Campallo e Israel Galván... Ahí es nada.
         A lo largo de este artículo y de una segunda entrega, pretendo ofrecer una visión general del origen, evolución y el toque de este instrumento, además de resumir alguno de los patrones más señalados que desarrolló el maestro Soler, en un intento -no siempre vano- de atrapar el duende del compás entre las cinco líneas de un pentagrama.

         NOTA: Puede verse en este enlace una entrevista sin desperdicio que el crítico Luis Clemente le hiciera al maestro Soler rayando el comienzo de este siglo...



APUNTES HISTÓRICOS

         No es ningún secreto que el acompañamiento de percusión en el flamenco lo han constituido tradicionalmente las palmas y los pies. 'Tocar las palmas', como se dice en Andalucía... y no dar palmas o hacer palmas, que son expresiones foráneas. Eso y marcar el compás del cante o del baile con el taconeo han sido siempre la base rítmica de cualquier palo.
         No podemos olvidarnos de otras formas más primarias, tales como tocar con los nudillos en la mesa o en la barra de una taberna mientras se cantaba... golpear con el bastón en el suelo, el clásico cántaro con una zapatilla de las zambombás navideñas y hasta las populares panderetas...
         Pero no es menos cierto y evidente que en las últimas décadas, con el boom de la música popular, se han producido diversas fusiones y, por tanto, nuevas incorporaciones de instrumentos a los grupos flamencos.
         Años antes de la introducción del cajón ya se usaban elementos exóticos, tal fue la moda de los caribeños bongós, que hacían furor en las rumbas de los 70. Podemos oírlos en la famosísima rumba 'Entre Dos Aguas', tema que era un bis obligado en todos sus conciertos, grabado a dos guitarras y bongós por el maestro Paco de Lucía en el año 73, cerrando su disco 'Fuente y Caudal'. Un disco emblemático que la Bienal de Flamenco homenajea prestándole el título a su presente edición.
         Con el tiempo, los instrumentos provenientes de otras músicas se fueron incorporando al acompañamiento de las grandes compañías flamencas, tanto que hoy día es fácil ver en el set de un percusionista flamenco, además del cajón, la presencia de congas o bongós, el djembé africano, cortinas, platos, cencerros y todo tipo de efectos al uso.
         No obstante, ninguno de estos instrumentos ha tenido el éxito inesperado, la popularidad y la aceptación que la llegada del cajón provocó en los ambientes flamencos. Su utilización creció exponencialmente en pocos años... aunque todavía hay en Sevilla algunas peñas donde lo consideran algo externo a la pureza de este arte... en fin.

ORÍGENES DEL CAJÓN

         Como seguramente muchos ya sabéis, el cajón flamenco procede de un instrumento muy similar usado tradicionalmente en la música negra peruana o música afro-peruana, pudiendo decirse con toda propiedad que nuestro cajón es una variante de aquel.
         El Cajón peruano original lleva su tapa fija o pegada, es decir, que no presenta lados o esquinas sueltos que den lugar a la característica vibración aguda del cajón flamenco. Tampoco lleva bordones o accesorios que resuenen en su interior, por lo que, en conjunto, su sonido es mucho más seco y, a menudo, más grave.
         Este popular instrumento tiene su origen en el siglo XIX, cuando trabajadores africanos del Puerto del Callao comenzaron a utilizar cajas vacías de bacalao o de ron para hacer percusión, puestas sobre un lado. En aquellos tiempos los esclavos negros de Lima, la bulliciosa capital del país andino, tenían prohibido usar sus propios tambores, suponemos que por cuestiones de orden público o, quizás, en un intento de reprimir su cultura nativa... pero eso no les impedía sentarse en el lateral de una caja vacía de pescado, de bebidas alcohólicas o similar para percutir sobre su culo o fondo de madera. Así marcaban el ritmo de sus cantos y sus bailes... con lo que, al final, montaban la fiesta de igual manera.
         Con el paso de los años, a alguien se le ocurrió cerrar la caja original por la parte trasera y, poco a poco, el cajón que conocemos fue tomando su cuerpo y formas actuales. (foto de cajón)
         Aún hoy es el instrumento base en la música negra peruana y podemos escucharlo en cualquiera de las grabaciones de Susana Baca, máxima exponente hoy día de esta cultura musical en su país y fuera de él, ya que se ha hecho muy popular en todo el mundo al amparo de la etiqueta, tan de moda, de la "world music". Igualmente podemos apreciar su sonido en los discos del cantante peruano afincado en Sevilla, Richard Villalón.

DESCUBRIMIENTO Y ADOPCIÓN

         Según cuentan las crónicas, el primer cajón (quizá fueron dos) fue traído a España hace más de tres décadas por la compañía del desaparecido Paco de Lucía, entonces de gira por Sudamérica.
         Al parecer, en una recepción o fiesta dada por las autoridades al elenco del guitarrista, había un percusionista afro-peruano tocando el cajón... Los músicos de la banda, y el mismo Paco, quedaron prendados de su sonido y se plantearon la posibilidad de incorporarlo a la percusión flamenca.
         Otra versión bien fundada cuenta que la fiesta era en casa de Chabuca Granda, la gran dama de la canción peruana, y que fue su experto cajonero, Caístro Soto, el que le regaló (o vendió...) uno de sus cajones al propio Paco...
         Sea como fuere, el resultado fue que la mítica banda del maestro de Algeciras comenzó a introducir el cajón en lugar de las congas o bongós que venían usando, al pensar Paco, con mucho tino, que su sonido seco y sobrio era más apropiado para la mayoría de los palos flamencos que la percusión cubana.
         En aquella época, la percusión del famoso septeto de Paco de Lucía la llevaba Rubén Dantas, mientras que Manuel Soler acompañaba con las palmas, de lo que era también un maestro fuera de serie, tocaba percusión y se marcaba alguna de sus tremendas 'pataítas'... No en vano, ganó su primer premio de baile con 12 años en su Sevilla natal y se forjó en la tradición acompañando a las mejores figuras desde tan temprana edad.
         Con esto queremos apuntar, que -aunque sigue corriendo la voz de que fue Rubén Dantas, sin duda un percusionista de élite, el que introdujo el cajón en el flamenco- el verdadero maestro del compás flamenco, y por algo Paco lo llevó con él al baile y al toque durante 14 años, no era sino Manuel Soler... quien, con toda seguridad, introdujo todo lo que sabía en este nuevo instrumento. Por algo era un erudito del acervo gitano... guitarrista, bailaor, compositor, palmero y gregario de lujo del genio gaditano.
         De hecho, muy poca gente sabe, aparte de sus alumnos... ¡y los míos!, que mi querido maestro tocaba utilizando uno de sus pies. Esto es, que añadía el golpe del tacón al de sus dos manos... por algo tocaba como nadie. Pero eso es otra historia.
         En cuanto a quién trajo el cajón a España, mi amigo Teo asegura que fue el marido de Betty Misiego (¡¿?!) quien lo intentara introducir sin éxito en los años 50 ó 60.
Paco de Lucía firmándole un cajón
a Manuel Soler.
         Tuvo que venir de la mano de una figura como Paco de Lucía y sus grandes músicos para ser rápidamente adoptado por artistas de la talla de los Ketama, con Antonio Carmona a la cabeza. De ahí, su popularidad empieza a correr como la pólvora y pasa, en poco tiempo, a ser la novedad imprescindible en los discos de sevillanas y de flamenco durante los 80. Incluidos los de Camarón... muchos grabados por el propio Soler, claro está.
         ¿Que si fue Manuel Soler, Rubén Dantas o el propio Paco de Lucía el que dió el primer paso, tomó la decisión o tuvo la ocurrencia de traer el cajón...? Pues yo diría como el clásico... fue cosa de Fuenteovejuna...

Imprescindible para conocer al maestro Soler:
https://www.youtube.com/watch?v=7II-rkiTaYc

Otro enlace con información sobre Manolo Soler y su biografía:
http://decajonflamenco.com/25.html

Y en la próxima entrega: 
Técnica básica del cajón, toques principales y el estilo de Manuel Soler. Apuntes sobre los ritmos peruanos para el cajón.

Fernando García "Percu" es percusionista y director de la Escuela LATiDOS

lunes, 23 de junio de 2014

El Monasterio de LA CARTUJA de Cazalla: ESPACIO para el DISFRUTE y para el ARTE


El Monasterio de LA CARTUJA de Cazalla
ESPACIO para el DISFRUTE y para el ARTE

Un fabuloso LEGADO
    La Cartuja de Cazalla de la Sierra es una de las 4 cartujas existentes en Andalucía y de las 26 que hay en toda España. Situado en pleno Parque Natural de la Sierra Norte, a 3 Km. de Cazalla de la Sierra y a unos 70-75 minutos de Sevilla capital, este monasterio cartujo del Siglo XV ofrece un paraje lleno de armonía, serenidad y belleza impactante. De este lugar, que el paso del tiempo convirtió en ruinas desde que los monjes fueron expulsados, emana una energía muy especial debido a su situación en plena naturaleza, donde reina el silencio, la paz y el sosiego.
    El recinto histórico estuvo abandonado y ruinoso durante 140 años, pero ha sido restaurado con gran éxito a partir de su adquisición por particulares en los años 70. Cuenta con vestigios mudéjares del Siglo VIII, como el manantial y la mezquita, de cuando fue un asentamiento de los Fihríes (mineros de hierro). Sus estilos arquitectónicos son: renacentista, gótico y barroco.
   El monasterio tiene muchos y variados espacios, interconectados y amplios. Dos claustros, dos iglesias, dos capillas, una sala capitular, las antiguas celdas de legos, jardines y terrazas con magníficas vistas.

La reseña HISTÓRICA:  
    Quizás la importancia que todos le han dado a este lugar, resida en su altura y en su agua. Se trata de una meseta caliza sobre el valle del Huéznar en donde brota un manantial inagotable y desde la que se contempla la salida del sol. Los estudios arqueológicos coinciden en que fue siempre utilizado con fines religiosos, existiendo un asentamiento anterior al paso de los fenicios cuando abrieron "La Ruta de la Plata".
    A mediados del Siglo VIII (745) musulmanes del norte de África se instalaron en esta zona para trabajar en las cercanas Minas del Cerro del Hierro. Fue entonces cuando el Wali de Córdoba, primer caudillo de Al-Ándalus, construyó un molino de trigo, un molino de aceite y una mezquita que duró 500 años.
    En el Siglo XIV, según se hace referencia en el Libro de la Montería, se convirtió en un pabellón de Caza de osos llamado "El Castillejo", donde se hospedaban los nobles españoles y la realeza, como Pedro I El Cruel, Fernando III El Santo o El Príncipe de Gales. Después se convirtió en la sala capitular que los monjes utilizaron desde el Siglo XV.
    Los primeros monjes que se instalaron en torno a 1416 en el monasterio de Cazalla fueron Jerónimos, como filial del monasterio de San Isidoro del Campo de Santiponce, y lo abandonaron 50 años más tarde, volviendo a su monasterio de origen. En 1476 llegaron a Cazalla los Cartujos quienes ampliaron el monasterio y construyeron la iglesia de estilo Gótico sevillano con Sagrario Barroco navarro, en honor de Nuestra Señora de la INMACULADA CONCEPCIÓN, y allí permanecieron hasta mediados del Siglo XIX. Su expulsión, debida a la Desamortización de Mendizábal, dejó la Cartuja en un completo abandono, pasando de unas manos a otras y sufriendo un deterioro progresivo que le llevó a un estado absolutamente ruinoso, llegando a ser usado el recinto como simple refugio para el ganado. A finales de los 70 fue adquirida por particulares que pusieron en marcha su restauración.
 


El estilo de vida de los CARTUJOS
    La Orden Cartujana fue experimentando cambios a lo largo del tiempo, algunos importantes, pero estos nunca fueron radicales, ni llevaron consigo una extraordinaria separación de las pautas primigenias, sobre todo, de las que se refieren a la vida cotidiana del monje. Cualquier monasterio de la Orden se encontraba habitado por una comunidad compuesta por dos grupos de monjes, los llamados padres y los llamados hermanos conversos o legos.
    Los padres eran monjes dedicados exclusivamente a la contemplación, al continuo diálogo con Dios, a la lectura espiritual, al rezo y a la ejecución de algún trabajo manual no productivo. No realizaban, pues, una labor de predicación o beneficencia, sino que, convencidos del bien que con ello podían hacer a sus semejantes, se entregaban por completo a la contemplación y adoración de Dios. Su especial particularidad era que, a diferencia de otros monjes cada uno de los padres cartujos realizaban cotidianamente las actividades (orar, leer, trabajar, comer y dormir) de manera individual, en absoluta soledad, silencio y aislamiento, en el ámbito de la celda, que consistía en una casa con su huerto o jardín. Característico también era el clima de simplicidad y pobreza en el que se desarrollaba la vida del padre cartujo, reflejado en su austero hábito, en las frugales comidas (con frecuentes ayunos), en el ámbito arquitectónico donde habita el monje (la celda desnuda)  o, incluso, en su propia liturgia, de una marcada sobriedad y sencillez. 

    Es cierto que las comunidades cartujanas, con el paso del tiempo llegaron a ser poseedoras de extensos patrimonios y de espléndidos monasterios, pero esta riqueza jamás trascendió a la vida cotidiana del cartujo que continuó viviendo dentro de las mismas pautas de soledad y pobreza, como los antiguos anacoretas. Junto a ello, los cartujos también llevaban a cabo, en momentos específicos del día o en determinados días a la semana, prácticas comunitarias, propias de la vida cenobítica. Estas eran, por ejemplo, la celebración cotidiana, en común, en el ámbito de la iglesia, de distintas partes del Oficio Divino, como los maitines o las vísperas, y de la misa conventual o, ya en algunos días concretos (por ejemplo domingos y días de festividad religiosa), la comida en común, las reuniones en la sala capitular y el paseo. Por supuesto, los monjes contaban también con la tutela o dirección de un superior o prior.
    El segundo grupo es el de los hermanos o legos. La presencia de este segundo grupo tuvo su origen en una razón de orden práctico. San Bruno quiso que su comunidad constituyera una unidad orgánica independiente, con autonomía económica. Para poder alcanzar este objetivo y dado que los monjes ermitaños debían dedicarse exclusivamente a la contemplación, era imprescindible que dentro de la comunidad se integrasen otros religiosos que se ocupasen de los trabajos productivos y de las necesarias relaciones con el exterior, fundamentales para la subsistencia de todo el conjunto. De ahí la importancia de los hermanos que, aún sintiendo como los padres una vocación contemplativa, decidían entregar parte de su tiempo al trabajo que permitía la independencia de la comunidad. Aunque su régimen de vida era menos severo que el de los padres, sus actividades (cultivo de la tierra, cuidado del ganado, etc.) se desarrollaban con las mismas pautas de pobreza y sobriedad. Generalmente los legos pertenecían a un estrato social más bajo que el de los padres; sin embargo, también es cierto que a lo largo de la historia personajes de alta cuna o elevada cultura decidieron por humildad ingresar como conversos en los muros de las Cartujas.
   “Nuestra ocupación principal y nuestra vocación es la de dedicarnos al silencio y a la soledad de la celda. (…) En ella con frecuencia el alma se une al Verbo de Dios, la esposa al Esposo, la tierra al cielo, lo humano a lo divino”. (Estatutos cartujos, 4.1).
    Las comunidades cartujanas vivían aisladas del mundo, bajo una estricta clausura. Su número de miembros era relativamente pequeño. En los orígenes solo se admitía en cada monasterio 13 padres (incluido el prior) y 16 legos. Con el paso del tiempo este número se elevó; no obstante, nunca se permitieron comunidades excesivamente numerosas. En un principio la economía de las comunidades estaba basada en la agricultura y la ganadería, a cargo de los hermanos, pero con el tiempo también se aceptó la explotación de propiedades rústicas y urbanas y las cuantiosas donaciones de los benefactores.
Alguien se refería a la orden cartuja como: ¨Esta elite contemplativa, equivalente católico al (auténtico) budismo Zen, al  hinduismo (verdadero) o al (genuino) sufismo.¨
    Decían los cartujos que el ritmo imperturbable de este género de vida, un día tras otro, conduce a una existencia sabia y longeva. No hay distracciones frívolas que disipen la mente y debiliten la voluntad. El rigor de la soledad y el gran silencio, la pobreza de los hábitos, el trabajo manual, los ayunos, la interrupción del sueño… Todo ello, practicado con espíritu de penitencia, favorece la unión con la Naturaleza y da al cuerpo salud.
    La dieta es también muy estricta. Jamás se come carne. No hay desayuno. Desde septiembre hasta abril sólo se cena una frugal colación. Hay abstinencia de lacticinios (lácteos) en Adviento, Cuaresma y todos los viernes. Un día a la semana se ayuna a pan y agua. Eso sí: la comida principal es nutritiva y generosa.

La jornada de un Cartujo:
Entre 19:30 y 20:00 horas: Acostarse.
23:30: Levantarse y orar en la celda.
00:15: Maitines seguidos de Laudes (en la iglesia).
Laudes de la Santísima Virgen (en la celda) y acostarse.
6:30: Levantarse.
7:00: Prima-Angelus.
8:00: Misa conventual en la iglesia.
Lectio divina (lectura meditada de la Biblia).
10:00: Tercia. Estudio-trabajo manual.
12:00: Sexta. Ángelus.
Comida-Recreación (trabaja, lee, toma el sol…).
14:00: Nona. Trabajo manual-estudio (el equilibrio entre ambos difiere en cada caso).
16:00: Vísperas de la Santísima Virgen.
16:15: Vísperas en la iglesia. Colación-lectura-oración.
18:45: Completas. Ángelus
19:30-20:00: Acostarse.


La CARTUJA de Cazalla HOY
    Tenemos el privilegio de estar en el mismo sitio donde, durante 450 años, los hermanos Jerónimos y Cartujos vivieron en la sobriedad y el silencio. La filosofía cartuja puede resumirse en la sencillez: cuanto menos tienes, más libre eres; cuanto menos hablas, más cercano al cosmos puedes estar.
    Hoy en día, nuestra misión es crear o facilitar espacios donde las personas puedan disfrutar de lo que significa el AQUÍ y el AHORA… Sentir el momento, sin contaminación acústica, lumínica, ambiental ni acuática. El agua pura emana del mismo manantial que hace más de 3.000 años. Por supuesto no hay ruidos de coches y se pueden ver las estrellas tan claramente que fue denominado un lugar 5 estrellas o “espacio Starlight” por la UNESCO.
    Actualmente es Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural, de propiedad y gestión privada, abierto al público los fines de semana y los festivos de todo el año.
    Aparte del esplendor de sus muros y salas, la acústica de los espacios ofrece un lugar muy especial para practicar cualquier tipo de expresión artística, en particular la música y el canto.

    En los diversos espacios del monasterio se celebran todo tipo de eventos: principalmente FESTIVALES CULTURALES, CONCIERTOS, ESPECTÁCULOS, ENCUENTROS, BODAS, TALLERES ARTÍSTICOS, TERAPÉUTICOS, de CONOCIMIENTO y SALUD (danza, música, canto, mindfulness, yoga, meditación, sanación, cerámica, pintura, teatro, etc.), CELEBRACIONES SOCIALES y CULTURALES, VISITAS ESCOLARES y VISITAS GUIADAS. 

Los ESPACIOS
    El enclave dispone de 2 salas para celebraciones (antiguas iglesias de estilo Gótico sevillano y Barroco navarro), un refectorio, dos claustros, dos capillas y zonas ajardinadas. Dispone de “suites” (las antiguas celdas de los legos, restauradas con mucho encanto, con una decoración rústica y elegante a la vez) para alojar a 20 huéspedes, las cuales ofrecen hermosas vistas hacia el Claustro de Legos, los jardines y el valle. También dispone de una “suite” nupcial.
    Hay grandes espacios para organizar un evento, todos en una sola planta y sin desniveles, en los que se armoniza la naturaleza, la historia, la energía positiva y la belleza.
    Junto a la misma puerta del monasterio existe una casa rural, “La Hospedería”, que dispone de otras 20 plazas de alojamiento.

Está ABIERTO al público fines de semana (de viernes a domingo) y festivos de 10 a 15 horas
    Aunque es posible reservar otros días y horarios para GRUPOS o concertar una cita previa llamando al 617 27 10 24.
    Os esperamos para una visita, una noche de estancia, una actividad artística, un curso de lo que os apetezca o para pasar unos días disfrutando de unas vacaciones en plena naturaleza.

Carolina Bourquin
Gerente de La Cartuja de Cazalla


Teléfonos: 95 11 93 446 - 617 27 10 24



lunes, 12 de mayo de 2014

ESCUELA CON ALMA, un proyecto para educar mejor.
Un nuevo paradigma educativo. Un reto hacia el futuro.


Escuela con calma. Escuela con amor.
Pedagogía cuántica. Pedagogía del ahora.

Escuela con Alma surge como respuesta innovadora, ante un sistema educativo que no ofrece soluciones efectivas a la actual crisis global en la que vivimos. Hemos sobrepasado los límites de la deshumaniza- ción, el consumismo, y el materialismo como forma de vida; y, lejos de satisfacernos, nos sumimos cada vez más en un vacío existencial, la gran lacra de la sociedad contemporánea. Buscamos recetas, reformas, milagros que nos puedan aliviar tanto sufrimiento y frustración. Seguimos buscando fuera lo que olvidamos mirar dentro de nosotros. Tratamos de resolver los conflictos bélicos, el paro, la escasez de recursos, el fracaso escolar, la violencia callejera, la creciente inmigración, etc. con soluciones que “parchean” un presente y que, lejos de solventar, promueven la desconfianza, el desamparo, el racismo y la intolerancia.

En un momento en el que la figura del docente, sufre un gran deterioro y falta de reconocimiento, surge Escuela con Alma, con el ideal de transformar la “visión” que la sociedad tiene del docente, devolvien- do así, la dignidad y el reconocimiento que tal profe- sión merece. Partiendo de la propia transformación del profesional, desde su práctica diaria, hasta lograr reorientar y completar, con este nuevo paradigma, la formación de los futuros profesionales de la educa- ción, y alcanzar el fin último, transformar las leyes educativas, de modo que sean un corpus útil, acepta- do y consensuado por todos, que permita ser la fuen- te que transforme la sociedad y un legado que perdure en el tiempo. En un momento en el que el alumnado muestra una creciente falta de esfuerzo 2 y motivación en su proceso de enseñanza-aprendizaje, Escuela con Alma viene a recordar y acompañar en el camino de retorno al “hogar”, el reencuentro con su propio Ser.

Ampliando la mirada, para que el niño redescubra el verdadero potencial que guarda en su interior, ampliando su capacidad creadora, devolviendo el entusiasmo y la alegría de Ser protagonista de su proceso de aprendizaje. Olvidamos la raíz, fundamento de las futuras sociedades, la única esperanza: La educación de nuestros niños y niñas. Si no logramos sembrar Amor, Compasión, Comprensión, desde la infancia, ¿cómo vamos a erradicar la violencia? En las escuelas, se habla de paz, igualdad, respeto tolerancia, sin embargo ¿hasta qué punto se modifican los hábitos comportamentales? ¿Cómo vamos a generar ciudadanos libres capaces de construir una sociedad pacífica, democrática, si educamos en conceptos, palabras que no son vivenciadas e integradas de un modo experiencial? No hay verdadero respeto sin el conocimiento. No hay libertad sin responsabilidad.

Es, en los primeros estadios del crecimiento, donde se adquieren estrategias de pensamiento y hábitos de conducta, que capacitan al niño para alcanzar una vida plena y feliz. A través del autoconocimiento, la autogestión de sus emociones, y la canalización de su verdadero y único potencial interior -fundamentos de Escuela con Alma- se logra crear a niños y niñas “Transformadores Sociales”, que habiendo crecido en la paz y vivido en el Amor, traigan la Paz y el Amor al Mundo.


Mª Amparo Belén García y García
Pedagoga y Maestra de Música. Osteópata, Quiromasajista, Reflexóloga, Kinesióloga, Maestra de Reiki, Facilitadora en Constelaciones Familiares, Cantante, Clarinetista y Compositora, especializada en “música orgánica” y Música Consciente. Actualmente trabaja en el C.P. La Raza, en Sevilla. Imparte cursos de Danza Oriental Consciente. Fundadora de la Asociación Pro Fundación Escuela Con Alma.



miércoles, 26 de febrero de 2014

EL YOGA A NUESTRO ALCANCE

Yoga es un método simple, aunque poderoso para liberar el verdadero potencial de la mente y el cuerpo. Yoga significa unión, conjugando pensamiento y acción o movimiento y respiración. La respiración es el puente entre nuestra parte física y emocional, además de conectarnos con el continuo fluir del momento presente. 
Los beneficios más evidentes de una práctica honesta y comprometida de yoga son: incrementa la flexibilidad, fuerza y vigor; mejora la concentración y la atención, la vitalidad, la relajación profunda, la calma, la alegría y armonía; corrige problemas posturales; reeduca el sistema respiratorio y circulatorio; y regula el metabolismo y la distribución óptima de la energía.



LOS CINCO PRINCIPIOS DE YOGA


Ejercicio Adecuado


¿Qué es ejercicio adecuado?

El Yoga ve al cuerpo como un vehículo para el alma en su viaje hacia la perfección. Los ejercicios físicos del 
Yogano están diseñados solo para desarrollar el cuerpo; también ayudan en las facultades mentales y en las capacidades espirituales. 

Los ejercicios físicos del Yoga se llaman Asanas, un término que significa una postura fija. El Asana (o postura) debe mantenerse por cierto tiempo. De todas formas esto ya es parte de una práctica avanzada. Inicialmente, estamos interesados en incrementar la flexibilidad del cuerpo.
El cuerpo es joven si es flexible. Los ejercicios yóguicos enfatizan en la salud de la columna vertebral, en su fuerza y flexibilidad. La columna vertebral alberga el sistema nervioso, que es el sistema telegráfico del cuerpo. Al mantener la columna fuerte y flexible a través del ejercicio, incrementamos la circulación y los nervios tienen asegurado su suministro de nutrientes y oxígeno. Las Asanas también afectan a los órganos internos y el sistema endocrino (glándulas y hormonas).


Tradicionalmente, los Yoguis practican Surya Namaskar, el Saludo al Sol, antes de la sesión de Asanas. Aunque existen muchas Asanas (8.400.000 según las escrituras) la práctica de las 12 posturas básicas contiene la esencia y todos los mayores beneficios de este maravilloso sistema. Las posturas para meditación y Pranayama incluyen la postura del Loto. Al final de cada sesión se debe realizar una relajación profunda.


Respiración adecuada


La mayoría de la gente usa solamente una fracción de su capacidad pulmonar para la respiración. Respiran de modo superficial, apenas expandiendo la caja torácica. Sus hombros están encorvados, tienen tensión dolorosa en la zona alta de la espalda y cuello, y sufren de falta de oxígeno. Deberían aprender la respiración completa yóguica.
Hay tres tipos distintos de respiración:
La respiración clavicular es la más superficial y el peor tipo posible. Durante la inhalación los hombros y la clavícula son elevados mientras que el abdomen es contraído. Se realiza un esfuerzo máximo, pero es obtenida una mínima cantidad de aire.
La respiración torácica es realizada con los músculos intercostales expandiendo el tórax, y constituye el segundo tipo de respiración incompleta.
La respiración abdominal profunda es la mejor, por cuanto lleva aire a la parte más baja y más amplia de los pulmones. La respiración es lenta y profunda, efectuándose por tanto un uso adecuado del diafragma.


De hecho, ninguno de estos tipos es completo. Una respiración yóguica completa combina los tres, comenzando con una respiración profunda y continuando la inhalación a través de las zonas intercostal y clavicular.


Relajación Adecuada


Cuando el cuerpo y la mente trabajan constantemente de modo excesivo, disminuye su eficacia natural para hacerlo. La vida social moderna, la comida, el trabajo, e incluso los denominados “entretenimientos”, hacen que la relajación les resulte difícil a la mayoría de las personas. Muchas, hasta olvidaron que el descanso y la relajación, son modos naturales de reponer las energías. El común de la gente gasta mucha energía física y mental incluso al tratar de descansar, debido a la tensión. Gran cantidad de vigor corporal se consume inútilmente.

Mucha de nuestra energía se usa más para mantener los músculos continuamente listos para el trabajo, que en el trabajo útil realizado. Con el propósito de regular y equilibrar el trabajo del cuerpo y de la mente, lo mejor es aprender a economizar la energía producida por nuestro cuerpo. Esto puede hacerse aprendiendo a relajarse.

Recordemos que, en el curso de un día, nuestro cuerpo elabora todas las sustancias y energías necesarias para el día siguiente. Pero, sucede con frecuencia, que todas estas energías pueden ser consumidas en pocos minutos, por malhumor, cólera, ofensas o irritación intensa. El proceso de erupción y represión de emociones violentas, crece con frecuencia hasta convertirse en una conducta habitual. El resultado es desastroso, no sólo para el cuerpo, sino también para la mente.

Durante la relajación completa, no se consume prácticamente energía, o “Prana”, aunque se conserva un poco para mantener el cuerpo en condición normal, mientras que la porción restante se almacena y acumula.



Dieta Adecuada


Intentando basar nuestra dieta en  alimentos puros, simples y naturales los cuales se digieren en forma sencilla y promueven la salud. Las comidas simples ayudan a la digestión y asimilación de los alimentos. 
Los requerimientos nutricionales se dividen en cinco categorías: proteínas, carbohidratos, minerales, grasas y vitaminas. 

Comer alimentos recién cosechados, frescos, provenientes de la naturaleza, que crecen en tierras fértiles (preferentemente orgánicas, libres de químicos y pesticidas), nos ayudan a tener un mejor aporte de estas necesidades nutricionales. El procesar, refinar y cocinar en exceso, destruye la mayor parte del valor de los alimentos.

Una máxima saludable es: “Come para vivir, no vivas para comer”. Lo mejor es si entendemos que el propósito de comer es suministrar a nuestro organismo fuerza vital o Prana, la energía vital para la vida. Por lo tanto el mejor plan nutricional para un estudiante de Yoga es la dieta simple con alimentos naturales y frescos.

Cualquier cambio en la dieta debe hacerse en forma gradual.


Meditación (Dhyana)


Cuando la superficie de un lago está en calma, uno puede ver el fondo muy claramente. Esto es imposible cuando la superficie está agitada por las olas. De la misma manera, cuando la mente está en calma, sin pensamientos ni deseos, puedes ver el “Ser”, y a esto se le llama “Yoga”.


Podemos controlar la agitación mental: concentrando la mente en la atención el silencio, la observación y el trabajo de deseo - rechazo. La habilidad para concentrarse está en todos, no es extraordinaria ni misteriosa. La meditación no es algo que un Yogui tenga que enseñarnos, tu ya tienes la habilidad para silenciar los pensamientos.
La única diferencia entre eso y la meditación (en forma positiva) es que generalmente aprendemos a concentrar la mente externamente, en objetos.

Cuando la mente está completamente concentrada, el tiempo pasa sin que lo notemos, como si no existiera. Cuando la mente está concentrada, ¡no hay tiempo! El tiempo no es más que una modificación de la mente. El tiempo, el espacio, la causalidad y todas las experiencias externas son creaciones mentales.

Toda la felicidad que se logra a través de la mente es temporaria y efímera, está limitada por la naturaleza. Para alcanzar un estado de felicidad duradera y paz absoluta, primero debemos conocer como calmar la mente, concentrarnos e ir más allá de la mente. Llevando la concentración mental hacia el interior, hacia el ser, podemos profundizar la experiencia de la concentración perfecta. Este es el estado de Meditación.




Esther González Aláez

Licenciada en Educación Física, profesora y practicante de Yoga